México, 22 de noviembre de 2019.- Celebró el Banco de México 25 años de autonomía con un encuentro entre el actual gobernador, Alejandro Díaz de León y tres ex gobernadores Agustín Carstens, Guillermo Ortiz y Miguel Mancera, quienes establecieron una serie de desafíos, para mantener a pesar de las presiones y el complejo entorno mundial e interno, la independencia de la institución como una condición idónea para sostener una inflación baja y estable en beneficio del bolsillo de los mexicanos.
Agustín Carstens, actual director general del Banco de Pagos Internacionales, advirtió que “si realmente se resolvieran las disputas comerciales la economía mundial estaría creciendo mucho más”.
Indicó que el riesgo de recesión mundial se ve bajo, aunque no se puede descartar.
A pesar de que la inflación se encuentra dentro de la meta permanente de 3 por ciento, advirtió que el Banco de México no puede confiarse, pues puede ser víctima de su propio éxito.
Al tomar la palabra el exgobernador Guillermo Ortiz, denunció que los bancos centrales están sufriendo la presión de gobiernos y actores políticos populistas, que los acusan del bajo crecimiento en los ingresos y la pobreza.
Alertó que es preocupante que el banco central más relevante para el mundo este sufriendo ataques por parte del Ejecutivo Federal.
Por su parte, el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, resaltó que la autonomía del banco central ha permitido que la inflación en México deje atrás niveles de dos dígitos en beneficio de las familias mexicanas.
Asimismo, el ex gobernador Miguel Mancera quien fue testigo de la reforma estructural que otorgó la autonomía al Banco de México cuando estuvo al frente de la institución de 1994 a 1997, expresó que la autonomía del banco central ha sido positiva para el país, al contarse con el blindaje de las reservas internacionales, de una estabilidad financiera y sólido poder adquisitivo de la moneda nacional.
Y aunque indicó que la inflación se ha logrado dominar, no se debe bajar la guardia.