México, 7 de mayo.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmó que “va a ser muy difícil que haya marcha atrás” al proceso de transformación del país.
López Obrador reiteró que en este gobierno hubo una revolución de las consciencias masiva, que llegó a los pueblos más apartados y remotos del país.
“Nada más que ya quiero cerrar mi ciclo y además estoy muy contento, muy contento, lo digo de manera sincera. Primero, porque logramos sentar las bases de una transformación en marcha, en proceso. Ya va a ser muy difícil que haya marcha atrás a lo que se ha logrado, va a ser muy difícil que haya retrocesos. Va a ser difícil, porque ya hay mayor conciencia, lo que siempre digo, ya cambió la mentalidad del pueblo y cuando cambia la mentalidad del pueblo cambia todo”.
Dijo que sus adversarios están contando los días para que concluya su mandato.
“Y yo veo bien el porvenir de México. Estoy muy optimista”.
Insistió que para que México siga bien, no se debe “permitir la corrupción, aunque les moleste, porque eso es lo que más ha dañado a México, en toda la historia. Nada ha dañado más a México que la corrupción política, nada. Esa es la causa principal de la desigualdad económica, de la desigualdad social, de la violencia y de otros males. Por eso, cero corrupción. Cero impunidad. Lo segundo, no puede haber gobierno rico con pueblo pobre. Aunque les moleste que ya no ganan sueldos elevadísimos. Aunque les moleste”.
Sobre su estado salud, dijo que está muy bien, “no me he enfermado, tengo achaques por la edad y por las actividades, por el trabajo y el deporte, me duele mucho el pie, el carcañal y otras cosas. Pero, pero bien, todo muy bien. Descanso poco, pero bien, duermo tranquilo”.