Brooklyn, Nueva York, 25 de agosto.- Ismael “El Mayo” Zambada, líder histórico y cofundador del Cártel de Sinaloa, se declaró este lunes culpable de los 17 cargos que enfrenta en Estados Unidos por narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas, tras más de cinco décadas dedicado a actividades criminales.
La decisión se da luego de que la Fiscalía federal anunciara semanas atrás que renunciaba a solicitar la pena de muerte contra el capo mexicano, quien fue extraditado a territorio estadounidense en 2024 en una operación aún rodeada de incógnitas.
Con esta declaración, Zambada evita un juicio público como el que enfrentó Joaquín “El Chapo” Guzmán en 2019, aunque pierde el derecho a apelar la sentencia que le impondrá el juez Brian Cogan, la cual probablemente será de cadena perpetua.
“El señor Zambada se declaró culpable porque quería aceptar su responsabilidad. Esto no es un acuerdo de cooperación, no va a cooperar para nada”, aseguró su abogado Pérez durante la audiencia, al ser cuestionado por la prensa sobre si el capo habría negociado con las autoridades.
El Gobierno estadounidense estimó en 15 mil millones de dólares los bienes y activos generados por Zambada a lo largo de su trayectoria criminal, recursos que ahora deberán ser confiscados por la justicia de ese país.
En su declaración ante la corte, “El Mayo” aceptó haber fomentado la corrupción en México:
“Reconozco el gran daño que las drogas han provocado a Estados Unidos, México y otros lugares. Asumo la responsabilidad y pido perdón a aquellas personas que se hayan visto afectadas por mis acciones”, afirmó, al tiempo que admitió haber promovido la complicidad de policías, militares y políticos.
La audiencia en la corte federal de Brooklyn se extendió por unos 45 minutos y contó con la presencia de alrededor de 30 periodistas, además de agentes de la DEA y funcionarios judiciales.
Con ello, uno de los narcotraficantes más poderosos y longevos de México pone fin a medio siglo de liderazgo criminal, aunque su condena formal y el monto de los bienes que finalmente serán decomisados quedarán en manos del juez Cogan en los próximos meses.

