México, 19 de septiembre.- El presidente Andrés Manuel López Obrador confió de que en 10 años va a mejorar la impartición de justicia en México con la reforma al Poder Judicial, con vigencia desde el lunes pasado.
López Obrador volvió a defender la reforma, cuyo principal objetivo es la elección por voto popular de jueces, magistrados y ministros.
“Con la reforma pienso que las cosas van a mejorar, porque el juez va a ser nombrado por la gente, no le va a deber el favor a nadie, va a ser elegido por los ciudadanos y esa es la democracia, y lo mismo los magistrados y los ministros. Todos los cambios son buenos, todos los procesos de renovación son importantes, por eso tengo la confianza de que en 10 años va a estar mucho mejor la impartición de justicia”, dijo.
Insistió que el Poder Judicial “está tomado, atrapado, secuestrado, y está solo al servicio de una minoría y de la delincuencia”.
“Por eso no se imparte justicia, pronta, expedita, por eso se atiende solamente a los que tienen influencias tanto de la delincuencia organizada, como la de cuello blanco. Entonces, se dejó el Poder Judicial, no se llevó a cabo una reforma, se convirtió en un poder anónimo, desconocido, donde nunca se vigilaba, se cuestionaba, se castigaba a ningún juez, ningún magistrado, ningún ministro”, señaló.
López Obrador recordó que los juzgadores eran elegidos por el presidente, los legisladores, e incluso, por los líderes de los partidos políticos.
“Se repartían por cuotas para hacer las componendas y siguiera dominando una oligarquía. Entregaban el Poder Judicial como moneda de cambio para hacer esta alianza, la alianza de los potentados”, refirió.