México, 8 de febrero de 2024.- La oposición en el Senado, calificó como antinacionalista, lambiscón, aberración, locura y sin sentido la petición de Lucía Trasviña, senadora de Morena, a Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, para que la ultraderecha no gane los comisiones presidenciales del 2 junio próximo.
Manuel Añorve, coordinador del PRI, acusó que esa fue una petición fuera de lugar, que “no tiene ningún sentido”.
Dijo que Estados Unidos es un país merece respeto, pero “en ningún momento podemos aceptar que intervenga en una elección tan importante”.
Señaló que “no requerimos un intervencionismo”.
“Yo en lo personal nunca podría aceptar que viniera Estados Unidos a intervenir y vigilar una elección en México, ni Estados Unidos se prestaría, no lo ofreció ni Trump con sus exageraciones en campaña. (…) No podemos pedirle a un país extranjero, cualquiera que sea, que venga a intervenir en las elecciones, o sea, es un despropósito, una aberración”.
Comentó que el área jurídica de su partido, valorará la posibilidad de interponer una queja ante el Instituto Nacional Electoral (INE) por estas declaraciones de la morenista
El coordinador del PAN, Julen Rementeria, aseveró que esta solicitud de Morena obedece más al miedo que tiene de que Xóchitl Gálvez va a ganar la elección presidencial.
Lamentó el desconocimiento de la legisladora de Baja California Sur ante ciertos temas.
“Pero, pedirle a los Estados Unidos que no apoye a un proyecto que lo que propone son las libertades, la libre empresa, el respeto a los derechos de las personas, el combate a la corrupción, el combate a la delincuencia y que permita que siga un gobierno de desastre como el que tenemos, pues es una simple locura por parte de la senadora”.
Germán Martínez, senador del Grupo Plural, calificó como un episodio bochornoso y entreguista lo sucedido con Lucía Trasviña, que se culinpina frente a los Estados Unidos.
“Me parece antinacionalista, me parece entreguista, me parece de verdad lambiscón con Estados Unidos esa actitud”.
Expuso que no se acepta la injerencia de ningún gobierno en las decisiones que sólo competen a nosotros.