México, 23 de septiembre.- El secretario de Salud, David Kershenobich, reconoció que el país enfrenta el reto de incrementar la cobertura de vacunación contra el sarampión para alcanzar la meta del 95 por ciento, como lo recomienda la Organización Panamericana de la Salud (OPS), ya que actualmente se ubica en alrededor del 87 por ciento.
Explicó que durante la pandemia de COVID-19 se redujo la asistencia de niñas y niños a los centros de salud, lo que ocasionó un rezago en la aplicación del biológico.
“Lo que pasa es que durante el periodo de la pandemia de COVID-19, los niños no acudieron a vacunarse en la misma forma en que ocurría normalmente. Entonces, en ellos estaba más baja la vacunación. Actualmente esos niños han crecido y entonces son los niños que tenemos que vacunar en forma más importante”, señaló.
Detalló que la vacuna se aplica desde los seis meses de edad, además de los esquemas tradicionales a los 12 y 18 meses y una segunda dosis a los seis años.
En este año, dijo, se han aplicado alrededor de 6.5 millones de dosis, lo que ha permitido contener los brotes registrados, principalmente en Chihuahua, donde aún se atiende a poblaciones de trabajadores migrantes.
Kershenobich subrayó que el brote no se originó en México, sino que fue importado desde Texas.
“La vacunación no puede ser forzosa, tenemos que apelar a que la gente acuda a vacunarse”, puntualizó, al recordar que los contagios se concentraron en personas que viajaron a esa entidad estadounidense y regresaron al país.

