México, 21 de julio.- La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que no existe razón para que Estados Unidos imponga sanciones a México por el traslado de operaciones de carga aérea del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), como ha advertido la administración del presidente Donald Trump.
Durante la conferencia matutina, la mandataria recordó que la decisión de canalizar la carga dedicada al AIFA fue tomada por el gobierno federal con base en estudios técnicos y criterios de soberanía nacional, con el objetivo de reducir la saturación en el AICM y fortalecer la infraestructura del nuevo aeropuerto ubicado en Santa Lucía.
“Entonces, se toma la decisión a partir de un estudio, de una revisión técnica, de que la carga se vaya al AIFA y además que se reduzca el número de vuelos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
Entonces, no hay razón para tener alguna sanción que tenga que ver con este asunto. ¿Qué es lo que se privilegió? La seguridad”, subrayó Sheinbaum.
La jefa del Ejecutivo explicó que la reubicación de los vuelos de carga no se trató de una medida improvisada, sino de una política planificada en la que participaron dependencias como la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), encargada del AIFA, y la Secretaría de Marina (Semar), que opera el AICM.
Reconoció que algunas empresas estadounidenses expresaron inconformidad en su momento por el corto tiempo para adaptarse, pero aseguró que la mayoría se ha beneficiado del nuevo esquema logístico que les permite operar con menos tráfico y mayor eficiencia.
“Ya pasó más de un año, año y medio, y las empresas se han ido adecuando a esta nueva circunstancia, que es benéfica para todos”, apuntó.
Sheinbaum destacó que actualmente el AIFA opera con normalidad, con nuevos vuelos internacionales programados para diciembre, y que se han fortalecido las aduanas y recintos fiscales para garantizar un manejo más eficiente de la carga.
Por ello, insistió en que no existen fundamentos para una sanción internacional, ya que se trata de decisiones legítimas del Estado mexicano orientadas a mejorar la seguridad, la logística y la infraestructura aeroportuaria del país.
Finalmente, defendió nuevamente la cancelación del aeropuerto en Texcoco, al señalar que la construcción del AIFA fue una “muy buena decisión”.

